Marea
Llegó la rabia, negué la rabia, brotó la rabia, lloré la rabia, fluyó la rabia, ahogué la rabia, flotó la rabia, nadé la rabia, creció la rabia, buceé la rabia, cedió la rabia, solté la rabia, calmó la rabia. Volví a ser yo.
Trajinera de historias o escritos misceláneos. Empecé el blog por obligación estudiantil y lo continué por ocio. Por cuestiones laborales, un tiempo usé "Alicia Escobedo" como seudónimo. Vivo inmersa entre generaciones analógicas, cargadas del "Antes todo estaba mejor" y las generaciones digitales que ven el ayer inmediato con filtro sepia. Como no sé si debo dar vuelta a la página o capturar la pantalla para recordar las cosas tal y como están, mejor escribo donde puedo. Y puedo en internet.